Cuenta Mansilla en su famoso libro:
Enlazada y pialada la res, cayó en tierra. Creí que iban a matarla como lo hacemos los cristianos, clavándole primero el cuchillo repetidas veces en el pecho y degollándola en medio de bramidos desgarradores, que hacen estremecer la tierra. Hicieron otra cosa. Un indio le dio un bolazo en la frente dejándola sin sentido. Enseguida la degollaron.
-¿Para que ese
bolazo hermano? – le pregunté a Mariano.
- Para que no brame,
hermano -me contestó-. ¿No ve que da lastima matarla así?
Que la civilización
haga sus comentarios y se conteste así misma, si bárbaros que
tienen el sentido de la bondad para con los animales son susceptibles
o no de una generosa redención…
Lucio Mansilla. Una
Excursión A Los Indios Ranqueles. Edicol. Pag 190.
Comentarios
Publicar un comentario